- Actúe con rapidez antes de que la mancha esté seca.
- Raspe el exceso desde la tela con un cuchillo sin filo.
- Coloque la mancha boca abajo sobre toallas de papel.
- Esponjee detrás de la mancha con un removedor de alquitrán.
- Enjuague bien.
Lave en el agua más caliente que permita la tela.